Municipio del Distrito Metropolitano de Quito
Diagnóstico Estratégico - Eje Social
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ciudadanas.
Débil presencia de los
equipos, acciones y
programas sociales
municipales, así como en
su relación con la
ciudadanía.
Un Gobierno con cercanía
no solo depende de
infraestructura y dotación
de servicios cercanos con
los actores sociales, sino
que se vincule con la toma
de decisiones, procesos
de consulta y mecanismos
de participación ligados a
todos los momentos de la
política pública local. La
definición de las
Administraciones Zonales
son susceptibles de
revisión, mayor
desconcentración y
autonomía.
Falta de coherencia en la
aplicación de programas y
proyectos en el territorio.
Las políticas públicas
municipales no han sido
construidas sobre la base
de las necesidades del
territorio y no responde a
las demandas ciudadanas.
No ha existido una
efectiva coordinación entre
las diferentes
dependencias municipales
y las Administraciones
Zonales.
Falta de participación
ciudadana en la
construcción de las
políticas. Se habla más
que nada de la calidad de
participación y de que la
misma llegue a todos los
sectores sociales.
Alta hegemonía de un solo
sector organizacional en
cada sector ligado a la
“clientela electoral”. En
muchos casos la relación
de las instancias
municipales con cada
sector social, responde a
pactos e intereses.
Falta de credibilidad en el
Municipio, sus acciones e
iniciativas.
el corto, mediano y largo
plazos.
Falta de seguimiento y
evaluación de la Gestión
de las Administraciones
Zonales en Territorio.
Desorden interno en el
Municipio en cuanto a
competencias.
Existe una escasa
vinculación entre la
población y la
institucionalidad municipal.
Fragmentación e incluso
desaparición de redes de
la sociedad civil y de las
organizaciones barriales,
ciudadanas y
comunitarias.
Desesperanza en torno a
la política en general
(tanto nacional como
local), debido a una serie
de promesas no
cumplidas.
Devenir inercial del
municipio de su gestión y
sus programas.
Administraciones zonales
con poca autonomía.
Falta de liderazgo en la
ciudad para cambios
institucionales en lo
político y en el modelo de
gestión municipal.
Postergadas decisiones
para construir el Estatuto
Autonómico de Quito.
Problemas de integración
social, gobernabilidad
democrática de la
institucionalidad pública.
Planificación centralizada,
tecnocrática y
burocratizada.
Infraestructura y dotación
de servicios no siempre
cercanos a la población.
mediano y largo plazos.
El Estatuto Autonómico de
Quito constituye una
oportunidad única que
tiene la ciudad para
producir cambios en la
arquitectura institucional y
la gestión municipal, para
convertirlo cada vez más
en un gobierno de
cercanía con la población.
Asimismo, no puede
perderse de vista que
dicha construcción debe
(imperativamente)
construirse con un altísimo
grado de participación
ciudadana, de manera que
recoja las principales
demandas y anhelos de la
población y sea de hecho
el mayor vínculo de la
participación ciudadana
con la toma de decisiones.
Débil conexión de la
población a
herramientas
electrónicas,
informáticas y de
información.
Tanto la propia estructura,
municipal y sus empresas
públicas, carecen de un
sistema de información,
que permita a la
ciudadanía un acceso fácil
y rápido a sus servicios,
conocer de sus avances,
La falta de información
debilita la participación
ciudadana y la
gobernanza.
Sistema de comunicación
poco coordinado entre las
instituciones municipales,
Sin sobrevalorar la
tecnología, el nuevo
escenario global requiere
de desarrollo de
alternativas de e-
democracia o e-gobierno
que no pierdan el contacto
humano y la socialización.